Prosiguen las profundas discrepancias entre una gran parte de los pescadores federados, que compiten con regularidad y la Jefatura de la Sección de Pesca en León. Estos desacuerdos que se hicieron patentes en la Semana Internacional de la Trucha, se han repetido en el Open Ciudad de León programado con motivo de las fiestas de San Juan y San Pedro, hasta el punto que los cuarenta participantes inscritos han quedado reducidos a la cuarta parte.

De nuevo Javier Sancho, jefe de la sección, ha impuesto la obligación de pescar con una sola mosca para poder utilizar el escenario de Santa Marina. Los deportistas consideran esa norma una ingerencia inadmisible ya que la competición, en todo caso, debería regirse por el reglamento de competiciones de la Federación de Pesca.

En la Semana Internacional la organización corre a cargo de la Junta, que es soberana de sus normas, pero en el resto de concursos organizados por las sociedades federadas las normas deberían ser las federativas.

Las mismas fuentes consideran esta ingerencia una venganza del jefe de sección «que actúa a capricho» por el boicot que sufrió en la Semana, la menos concurrida y con peores resultados de su historia. «Debería preocuparse por los ríos, que están hechos una pena y sin apenas truchas, hasta el punto de que pescadores de Valladolid y Salamanca prefieran irse a Asturias o Cantabria, y dejar de incordiar a unos deportistas que además sueltan todas las capturas con el máximo cuidado».

La situación ya ha sido puesta en conocimiento del presidente de la Federación en Castilla y León, Enrique Domínguez, que pondrá los hechos en conocimiento de los superiores jerárquicos de Javier Sancho.